En ocasiones cuando paseamos por la calle y observamos a las personas caminando, inmersas en sus vidas, nos preguntamos cuántas de ellas hacen y van a donde quieren y cuántas están sujetas a obligaciones imposibles de abandonar. De tal manera que los primeros parecen caminar con vida propia y los segundos parecen ser movidos por una fuerza invisible ajena a su voluntad. Y entonces te preguntas si tenemos Movimiento Propio o bien si la totalidad de nuestra existencia pertenece y viene determinada por el Sistema, que controla férreamente cada paso que damos.
El Movimiento Propio es la energía con la que desarrollamos nuestra vida para realizar aquello que queremos y deseamos. Viene impulsado desde nuestro interior y no por las circunstancias externas, las obligaciones diarias o las personas que nos rodean. En otras palabras, el Movimiento Propio es el empuje, motivación o fuerza que nos hace ponernos en marcha y querer comernos el mundo en un momento determinado. Cuando nacemos nuestro Movimiento Propio es perfecto y a pesar de depender de los adultos en gran medida, nuestra autonomía es completa porque actuamos movimos por nuestras propias necesidades y deseos. Con el paso del tiempo nuestra energía se va debilitando, dejamos de centrar nuestra atención en nosotros mismos y perdemos parte de nuestro poder personal y en consecuencia de nuestro Movimiento Propio, pasando a ser movidos por hilos invisibles, como si fuéramos marionetas, pues ya no podemos hacer más que dejarnos llevar y ser arrastrados como papelitos a los que lleva el viento, con rumbo desconocido y muy alejados de nuestras metas y sueños.
Por eso no debemos perder de vista aquello que realmente nos motiva y nos hace felices porque estos estímulos son los que nutren nuestra alma y nos ayudan a conseguir el Movimiento Propio de forma natural. También es muy importante entrar en comunicación con el silencio y establecer una dialéctica con nosotros mismos, solo en esos momentos de comunión contigo mismo realizas una conexión real con tu interior y sabes hacia dónde quieres ir.
El Movimiento Propio es parte fundamental en nuestra vida, te permite ser el rey en el tablero y ganar la partida de ajedrez sin importar la estrategia que sigas o lo que estés dispuesto a perder. Te permite dar cada paso con firmeza y alcanzar las metas que te propones. Y aunque no puedas abandonar el Sistema, el Movimiento Propio te da la libertad suficiente para elegir el camino que deseas y situarte un poco más cerca de tus sueños. En la vida todo está en movimiento y nada puede ser interrumpido, pero ¿deseas ser tú quien establezca su Movimiento Propio o prefieres dejarte llevar y no hacer nada?. Como siempre, está en tu mano decidirlo.
El Movimiento Propio es parte fundamental en nuestra vida, te permite ser el rey en el tablero y ganar la partida de ajedrez sin importar la estrategia que sigas o lo que estés dispuesto a perder. Te permite dar cada paso con firmeza y alcanzar las metas que te propones. Y aunque no puedas abandonar el Sistema, el Movimiento Propio te da la libertad suficiente para elegir el camino que deseas y situarte un poco más cerca de tus sueños. En la vida todo está en movimiento y nada puede ser interrumpido, pero ¿deseas ser tú quien establezca su Movimiento Propio o prefieres dejarte llevar y no hacer nada?. Como siempre, está en tu mano decidirlo.